"Haciendo uso de las nuevas tecnologías de la comunicación, el mecanismo de integración regional funcionará fundamentalmente en línea; ello conllevará menos costos de operación y más efectividad en la generación de decisiones y en la aplicación del plan de trabajo", informó la cancillería de Ecuador en un comunicado.
El foro, agregó la cancillería, fue concebido "como un espacio flexible de trabajo mancomunado, no oneroso para los Estados miembros, y con reglas de funcionamiento claras y ágil en la toma de decisiones".
Prosur constituirá "una instancia de diálogo y colaboración, que trabajará para el beneficio de los pueblos, lejos de posturas ideológicas".
Los temas prioritarios de la agenda del foro comprenderán, según la declaración suscrita, las áreas de infraestructura, energía, salud, defensa, seguridad y combate al crimen, y prevención y manejo de desastres naturales.
En 2018 suspendieron su participación en el bloque Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú; y en 2019 lo hizo Ecuador.
Aún están activos, como miembros de Unasur, Bolivia, Uruguay y Surinam.
La sede del bloque en Quito, que costó 40 millones de dólares, albergará en el futuro la Universidad Indígena de Ecuador.
Bolivia, Uruguay y Surinam se abstuvieron de firmar la declaración de Santiago que creó Prosur, suscrita en cambio por los presidentes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Paraguay, más el embajador de Guyana.