La conducta y actitud del primer ministro destaca entre los debates de urgencia seleccionados en esta segunda jornada de retoma del curso legislativo, que el Gobierno intentó clausurar en una polémica decisión que finalmente fue condenada y anulada por la corte máxima esta semana.
La diputada también pide a Johnson que contribuya a "crear un ambiente seguro tanto en nuestro país como en nuestro Parlamento".
La intervención está motivada por los furiosos estallidos de genio, rabia y abusos verbales entrecruzados el día anterior entre las bancadas del Gobierno y la oposición.
"Las pasiones se exacerbaron, se pronunciaron palabras airadas, la cultura fue tóxica en ambos lados", reprochó el presidente de la Cámara, John Bercow, al abrir las sesiones este 26 de septiembre.
Los ánimos se calentaron con la aseveración del abogado del Gobierno, Geoffrey Cox, de que "este es un Parlamento muerto" que "no tiene el derecho moral de ocupar estos bancos verdes".
Johnson exacerbó el ambiente con una retórica insultante con la que trató de provocar a la oposición a emitir un voto de censura contra su Gobierno.
El primer ministro ignoró repetidas demandas para que moderara su retórica y tachó de "patrañas" a varias diputadas que casi le acusaron de incitar a la violencia cuando llama "traidor", "cobarde", "desleal" a quienes se oponen a un Brexit abrupto.
La gota que posiblemente desbordó el vaso fue una referencia de Johnson sobre la diputada Jo Cox, que fue asesinada por un inglés de ultraderecha durante la campaña del referéndum de la UE de 2016 en el que postulaba por la permanencia.
"La mejor forma de honrar la memoria de Jo Cox y, desde luego, la mejor forma de unificar al país sería, creo, ejecutando el Brexit", respondió el mandatario conservador, provocando a la mayoría de diputados.
En las tres horas largas de debate no relajó la actitud desafiante pese a las innumerables protestas por su "falta de humildad o contrición", por incumplir la ley y azuzar el ambiente de crispación nacional.
"Debe ser posible discrepar con amabilidad", observó el presidente de los Comunes.
En el frente contrario estaría el "establishment" del Parlamento, jueces y medios liberales que, de acuerdo con el primer ministro, solo buscan retrasar el Brexit o abortar el proceso de retirada del bloque de Bruselas.
Johnson gobierna con una minoría por encima de 40 escaños y se enfrenta a una Cámara contraria a abandonar la UE sin acuerdo y reacia a precipitar su dimisión hasta después del 31 de octubre.