Rivlin anunció que había decidido encargar la formación del ejecutivo a Netanyahu después de que las negociaciones para formar un gobierno de unidad entre el partido Likud, de Netanyahu, y la coalición Azul y Blanco encabezada por Benny Gantz, hubieran llegado a un punto muerto.
"He decidido darle, señor, la oportunidad de formar un gobierno", dijo Rivlin a Netanyahu en la ceremonia de nominación en Jerusalén.
El primer ministro también pidió un gobierno de unidad y que las negociaciones para formarlo se acaben rápido.
"La prioridad es un gobierno de unidad nacional, amplio y rápido", señaló Netanyahu, que considera que es necesaria una reconciliación nacional.
"Es vital en todo momento, pero ahora especialmente (…) Hemos pasado por una dura campaña electoral en todos los lados y para todos", afirmó el primer ministro.
"Necesitamos unir a la nación, sanar las fracturas porque nos enfrentamos a grandes desafíos", añadió.
Netanyahu y Gantz se reunieron hoy por la tarde con el presidente en su residencia oficial en Jerusalén para discutir la posibilidad de formar un gobierno de unidad.
Gantz señaló que no quiere formar un Gobierno "cuyo líder está imputado", en referencia a los tres casos de corrupción por los que está imputado Netanyahu y por los que podría ser acusado formalmente.
"Esta cuestión, junto a otras esenciales, son más importantes para nosotros que ninguna discusión sobre la distribución de ministerios o la rotación [en el cargo de primer ministro]", recalcó Gantz.
Para él, otro problema es la insistencia de Netanyahu de negociar en nombre de un bloque de 55 diputados, en lugar de hacerlo solo en nombre del Likud.
"Azul y Blanco está comprometido con la idea de unidad. Pero desde nuestra perspectiva, el orden apropiado sería que los dos principales partidos negociaran —solo ellos— para llegar a acuerdos en temas sustanciales y en el carácter del próximo Gobierno", declaró Gantz después del nombramiento de Netanyahu para formar gabinete.
El Likud ahora lidera un bloque de 55 diputados, sus 32, más los de fuerzas religiosas y de ultraderecha. Azul y Blanco obtuvo 33 escaños en los comicios, pero no tiene apoyo suficiente para conseguir una mayoría.
Ansioso por evitar unas terceras elecciones, Rivlin había presionado para que los dos partidos formaran un ejecutivo de unidad.
Netanyahu tiene 28 días para formar una coalición. Si no lo consigue, puede solicitar dos semanas adicionales al presidente.
Si finalmente no forma un gobierno, el mandato probablemente se le otorgará a Gantz.