El presidente del Legislativo catarí, Ahmad bin Abdullah Mahmud, lo advertía este martes en una reunión de responsables de parlamentos de los países euroasiáticos celebrada en Kazajistán.
"El mundo ya no es capaz de aguantar una nueva confrontación en esta región", señaló.
El 14 de septiembre varios drones y misiles burlaron los costosos sistemas antiaéreos estadounidenses Patriot e impactaron contra dos plantas petroleras de la compañía Saudi Aramco tras volar cientos de kilómetros sin ser detectados.
Pese a las afirmaciones de los hutíes, Estados Unidos y Arabia Saudí responsabilizaron a Irán del ataque a las instalaciones petroleras, algo que Teherán ha rechazado tajantemente.
Para el presidente del Parlamento turco, Mustafa Sentop, Yemen es escenario de una guerra no convencional alimentada por las tensiones entre saudíes e iraníes.
El legislador alertó que si Estados Unidos desata una guerra en Medio Oriente, podría poner en peligro la paz no solo en la región, sino también en el mundo entero. "Si los estadounidenses aprovechan el ataque contra las instalaciones petroleras saudíes como una excusa para comenzar una guerra, sería devastador", enfatizó en declaraciones a Sputnik.
Teherán calificó las acusaciones de "irresponsables" que apuntan a un "encargo" con fines políticos.
"Es un paso provocativo y destructivo porque no hubo ninguna investigación ni se presentaron pruebas, y todo se basa en unos argumentos absolutamente ridículos", subrayaba la Cancillería del país persa en un comunicado.
Las represalias saudíes
El día 20 los aviones de combate saudíes lanzaron ataques aéreos masivos contra la gobernación de Al Hudeida, en el este de Yemen, según informes de la televisión.
Los hutíes denuncian que los bombardeos saudíes representan una clara violación de los acuerdos alcanzados en el marco de las negociaciones celebradas en Suecia en 2018 y promovidas por la ONU.
En diciembre de 2018 los bandos del conflicto en Yemen celebraron en Suecia negociaciones, cuyos éxitos principales fueron la retirada de las tropas del puerto de Al Hudaida, escenario de combates desde julio pasado, y el establecimiento de una tregua en la zona.
Este 24 de septiembre desde la ONU, el secretario general del organismo António Guterres también advertía de un posible conflicto de gran escala. "Hay una posibilidad alarmante de conflicto armado en el Golfo, y eso no se lo puede permitir el mundo", remarcó al intervenir en la Asamblea General de la ONU ante jefes de Gobierno y de Estado de varios países reunidos en el foro.