"En este momento, no veo ninguna razón para que el Gobierno cambie su posición", dijo Merkel en una conferencia de prensa, añadiendo que "es esencial trabajar en una solución política al conflicto yemení".
En octubre de 2018, Alemania impuso un embargo a la exportación de armas a Arabia Saudí por el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, que también se extiende a los suministros de componentes de fabricación alemana para proyectos conjuntos con el Reino Unido, Francia y España.
Según publicó en febrero el periódico Der Spiegel, el entonces ministro de Exteriores británico, Jeremy Hunt, envió una carta al ministro alemán de Exteriores Heiko Maas en la que le pidió cancelar la prohibición de exportar armas a Arabia Saudí, alegando que a raíz de esa medida de Berlín, las empresas militares británicas no pueden cumplir con varios contratos con Riad.
A finales de marzo, el Gobierno de Alemania prolongó la moratoria a la exportación de armas a Arabia Saudí hasta el 30 de septiembre.