"El secretario general estableció una comisión interna de la ONU para investigar los sucesos que tuvieron lugar en el noroeste de Siria desde la firma del Memorándum para la estabilización de la situación en la zona de distensión de Idlib entre Rusia y Turquía el 17 de septiembre de 2018", dice el comunicado.
Al concluir la investigación de "la destrucción o los daños a las instalaciones incluidas en la lista de desconflicto, así como de aquellas que cuentan con el apoyo de la ONU en la zona", el organismo presentará los resultados de su trabajo ante el secretario general.
Moscú lamentó esta iniciativa que Guterres anunció el 1 de agosto, y el embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitri Polianski, declaró que el Gobierno ruso considera que la nueva comisión fue creada bajo la presión de ciertos países que buscan impedir que se logre la paz en Siria.
El 30 de agosto el centro ruso para la reconciliación en Siria comunicó que a partir del 31 de agosto en la zona de distensión de Idlib se decreta un cese del fuego unilateral por parte de las fuerzas gubernamentales sirias.