Durante la asamblea de la OEA, 12 países expresaron su apoyo a la aplicación de la iniciativa contra Venezuela, dado que representa "una amenaza a la seguridad de la región".
El embajador de Uruguay ante la OEA, Hugo Cayrus, resaltó los peligros de aplicar el TIAR al recordar que "el fin expreso del TIAR es asegurar la paz y proveer la ayuda recíproca para hacer frente a los ataques armados y conjurar las amenazas de agresión contra cualquier Estado americano".
Agregó que "la aplicación del artículo 6 del TIAR implica sentar un arriesgado precedente en cuanto a la amplitud del espectro que puede ser invocado para activar el tratado".
A su vez, la embajadora de México ante la OEA, Luz Elena Barrios, constató el rechazo de su país a la aplicación de este tratado.
Mientras, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, explicó en el programa de la televisión cubana 'Mesa Redonda', que el país atraviesa una tensa situación con el combustible, pero insistió en que se trata de un escenario coyuntural.
Entretanto, los chilenos recordaron los 46 años del golpe de Estado perpetrado por Augusto Pinochet, que le costó la vida al presidente Salvador Allende y dejó miles de muertos y desaparecidos en el país.
El Gobierno de Sebastián Piñera rechazó conmemorar oficialmente el aniversario y la Policía militarizada reprimió a los manifestantes.
En otro orden, en Panamá, continúan las presiones ciudadanas para obligar un cambio en las reglas que rigen actualmente la Asamblea Nacional.
En esta ocasión la Asamblea volvió a ser escenario de una protesta pacífica, donde cientos de ciudadanos acudieron para exigir cambios profundos en el accionar de ese organismo.
Por otro lado, la violencia, específicamente contra periodistas no deja de ser tema de debate en México. Una delegación de la Sociedad Interamericana de Prensa visitó el país para reunirse con altos funcionarios, y trabajar en la conformación de un grupo multidisciplinario que aborde el flagelo.
Estos temas en el programa '500 millones'.
