El mayor aumento se registró en Oriente Medio (8%) debido a los eventos religiosos de Ramadán y Aíd al Fitr —Fiesta del Fin del Ayuno—. En Asia y Pacífico, el turismo aumentó un 6%, en su mayoría debido a los turistas chinos.
Asimismo, advirtió de una caída del gasto en turismo de las dos grandes economías iberoamericanas: Brasil (-5%) y México (-13%).
El resto del mundo experimentó una mejora moderada: en Europa, el turismo creció un 4% debido en parte a la demanda interregional y en América del Norte y África, un 2%. La región caribeña con su 11% de crecimiento turístico, en su mayoría de turistas de EEUU, sigue recuperándose después de los huracanes Irma y María que la afectaron en 2017.
En total, el número de turistas internacionales creció hasta los 671 millones, 30 millones más que en el mismo periodo de 2018.
"El crecimiento está volviendo a su tendencia histórica y está en línea con la previsión de la OMT de un crecimiento del 3% al 4% de las llegadas de turistas internacionales para todo el año 2019", según el informe.
Entre los impulsores de estos resultados, la OMT indica una economía fuerte, viajes aéreos asequibles, una mayor conectividad aérea y una mayor facilitación de visados.
Sin embargo, la debilidad de los indicadores económicos, la prolongada incertidumbre sobre el Brexit, las tensiones comerciales y tecnológicas y los crecientes desafíos geopolíticos han empezado a afectar a la confianza de las empresas y los consumidores, alerta la OMT.