"Hoy es el aniversario de lo que pasó en Juiz de Fora, muchas gracias a Santa Casa de Juiz de Fora por sus saludos, estoy vivo gracias a dios, y dirigiendo con la gracia de dios. Todo el mundo de verde y amarillo para conmemorar nuestra fecha, nuestra independencia", dijo el mandatario en la puerta del palacio presidencial de Alvorada, en su última aparición oficial antes de la licencia de 10 días que comienza el 9 de septiembre.
Los médicos que atienden al mandatario estiman que la recuperación tras esta operación demandará unos 10 días, lo cual le dejaría poco margen para asistir a la primera jornada del debate general de la Asamblea General de la ONU, que comienza el próximo 24 de septiembre.
Bolsonaro fue apuñalado el 7 de septiembre de 2018 por un individuo en Juiz de Fora mientras era llevado en andas por sus seguidores en un acto electoral.
Tras el ataque, estuvo internado durante 23 días y se sometió a tres operaciones.
La puñalada le dañó parte del intestino, por lo que los médicos debieron colocarle una bolsa de colostomía para evitar que se complicara la cicatrización del área operada.
El hombre de 40 años está preso en una cárcel de Campo Grande (sur), desde dónde concedió una entrevista al periódico Folha de Sao Paulo en la que dijo que aún quiere matar al presidente de Brasil para cumplir "una orden divina" y al expresidente Michelle Temer.
"Cuando me vaya, mataré a Temer. Sé dónde vive en Alto de Pinheiros", dijo en una evaluación psiquiátrica, y también mencionó que una voz ya le ordenó comprar un arma para matar al expresidente.