"La defensa de Lula recurrirá a los mensajes de Telegram en defensa del expresidente (...) Los mensajes intercambiados entre el exjuez Sérgio Moro y los fiscales (...) refuerzan que Lula fue víctima de una conspiración que tuvo graves violaciones a sus garantías fundamentales", afirmó Zanin Martins.
Los mensajes, grabaciones de audio, vídeo y fotos, enviados por una fuente anónima, expusieron irregularidades en la mayor causa judicial de la historia del país.
El 3 de septiembre, el magistrado Joao Pedro Gebran Neto dijo que "no hay posibilidad de aprovechar" los mensajes interceptados debido a que "fueron obtenidos en desarrollo de una acción criminal", según un comunicado divulgado por el propio tribunal.
"Para el magistrado, no hay duda de que el hackeo de autoridades públicas no configura material apto a ser considerado como prueba", agregó la nota.
Sin embargo, Zanin Martins consideró que los mensajes publicados parcialmente por The Intercept deben ser usados independientemente de cómo hayan sido obtenidos.
La Operación Lava Jato se inició en 2014 para investigar sobornos pagados por grandes empresas de la construcción a la petrolera semiestatal Petrobras con el fin de conseguir contratos de obra pública, que terminaron en el bolsillo de dirigentes políticos y funcionarios del entonces Gobierno del Partido de los Trabajadores.
Como parte de estas investigaciones, el juez Moro condenó en 2018 a más de 12 años de prisión a Lula, acusándolo de recibir un departamento como supuesta coima.
La sentencia impidió al exmandatario participar en las elecciones de ese mismo año, en las cuales las encuestas lo daban como el favorito.