Hizbulá disparó ayer tres misiles antitanque contra una base y un vehículo militar israelíes. En ese momento, el Ejército israelí evacuó a dos soldados en camilla de la zona del ataque.
Cuando se produjo el ataque, el Ejército israelí confirmó que el grupo chiíta lo había atacado, pero tardó más de lo habitual en aclarar si había víctimas. Antes el silencio israelí, Hizbulá aseguró que había causado muertos y heridos.
Poco después Israel anunció oficialmente que el ataque, al que respondió disparando cien proyectiles contra el Líbano, no había provocado víctimas.
El Ejército israelí está "preparado para un ataque masivo contra Hizbulá", aseguró hoy el Canal 12 citando fuentes oficiales israelíes.
"El hecho de que (el líder de Hizbulá, Hasán) Nasralá se equivocara y no matara a ningún israelí salvó a Hizbulá de la destrucción de su programa de misiles de precisión. Los aviones (israelíes) estaban ya en el aire", a punto para atacar, según la misma fuente.