"[El primer ministro libanés] Saad Hariri pidió a Rusia usar su autoridad e influencia para impedir una escalada de la tensión con Israel", indicó el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
El 25 de agosto, dos aviones espías israelíes irrumpieron en el espacio aéreo libanés en la periferia sur de Beirut, un hecho que el Gobierno del país árabe calificó como una "flagrante agresión".
"Se subrayó la necesidad de que todos los bandos cumplan estrictamente el derecho internacional y, en concreto, la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU", comunicó.
Recalcó que Moscú se atiene consecuentemente a esta posición firme tanto en el Consejo de Seguridad, como en los contactos con los países de la región.
Desde el movimiento libanés Hizbula confirmaron que un dron israelí se estrelló sin causar daños, mientras que el segundo, cargado de explosivos, estalló en pleno vuelo.
"El Líbano confía en un mensaje fuerte a Israel para que cese sus violaciones de la soberanía", dijo Hariri, según un comunicado del Gobierno del país árabe.
El primer ministro libanés recalcó que los ataques israelíes contra las zonas pobladas pueden provocar una escalada de la tensión con consecuencias imposibles de predecir.
El Consejo de Seguridad del Líbano ha convocado para este 27 de agosto una reunión de urgencia sobre la incursión israelí.
