"Necesitamos urgentemente más datos sobre los efectos en la salud de los microplásticos, que están presentes en todas partes, incluso en el agua que bebemos", cita el ente a la directora del departamento de Salud Pública, Medio Ambiente y Determinantes Sociales de la Salud, Maria Neira.
La poca información disponible hoy en día, según el comunicado oficial, parece indicar que el agua potable contaminada por microplásticos no es perjudicial para la salud, pero es necesario "seguir estudiando este asunto y evitar que la contaminación por plásticos siga aumentando en todo el mundo».
La OMS también considera necesario reducir la contaminación por plásticos para proteger el medio ambiente y evitar que la población esté expuesta a los microplásticos.