En julio pasado el presidente de la Kneset (Parlamento israelí), Yuli Edelstein, informó después de su reunión con una delegación parlamentaria ucraniana en Israel que un grupo de diputados ucranianos estaba trabajando en el traslado de la Embajada de Tel Aviv a Jerusalén.
El ministro israelí indicó que durante la visita a Kiev que realizó del 18 al 20 de agosto una delegación israelí encabezada por el primer ministro Benjamin Netanyahu, Israel propuso a Ucrania seguir el ejemplo de Chequia y Hungría y trasladar su centro cultural y representación comercial de Tel Aviv a Jerusalén.
El presidente estadounidense, Donald Trump, rompió el consenso internacional en 2017 al considerar Jerusalén como capital israelí.
Poco después, trasladó a Jerusalén la Embajada de EEUU en Israel, que antes estaba en Tel Aviv, algo que va contra de las resoluciones de la ONU.
Sin embargo, algunos países, como Australia, Guatemala, República Checa, Brasil y Honduras, siguieron el ejemplo de EEUU y reconocieron Jerusalén como capital israelí.