"Los planteamientos son: mantener la relación de amistad cooperación y respeto, llevarnos bien, que podamos evitar la confrontación, y que no se fomente la xenofobia, que no se azuce en EEUU para despertar el racismo, maltrato, odio contra los mexicanos, queremos respeto", dijo el mandatario en su conferencia de prensa diaria.
"Se ha avanzado mucho en la relación con el presidente Donald Trump y esperamos que continúe así la relación, nos importa que se impulse aprobación del tratado de libre comercio (México, EEUU y Canadá, T-MEC)", añadió el jefe de Estado.
El T-MEC reemplazará al Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que ha estado vigente por más de 25 años, y su aprobación en el Capitolio será uno de los primeros asuntos de los cuales se ocupará Landau, quien fue ratificado por el Senado estadounidense el 1 de agosto pasado, más de cuatro meses después de su nominación.
México ya completó el proceso y falta que sea consumado por sus dos socios norteamericanos en el Congreso estadounidense y el Parlamento canadiense.
"Ya nosotros lo aprobamos, el Senado lo ratificó y esperamos que lo haga el Congreso de EEUU", dijo López Obrador.
Temas candentes
En la próxima recepción de las cartas credenciales del representante de Washington, "vamos a tener oportunidad de platicar", gracias a un cambió el protocolo que antes limitaba esa ceremonia a un saludo público y una fotografía.
"Ahora no es así, me entregan las cartas y nos reunimos", anticipó el presidente.
El tema más complejo de la relación es la crisis de cientos de miles de migrantes que recorren territorio mexicano, que llevó a negociar un acuerdo alcanzado el 7 de junio pasado en Washington, que comprometió a México a contener el flujo de indocumentados en 90 días, para evitar nuevos aranceles a sus los productos de exportación en el país vecino.
"Quisiera que los embajadores de EEUU en México no fueran como (Henry Lane) Wilson (1910 -1913)", dijo López Obrador, aludiendo al diplomático que apoyó a militares golpistas que asesinaron al presidente Francisco I. Madero (1911-1913), a quien López Obrador llama "apóstol de la democracia".
El nuevo representante, de 55 años, carece de experiencia diplomática, y es abogado por la Universidad de Harvard, quien ha trabajado en el Tribunal Supremo de EEUU con los magistrados conservadores Antonin Scalia y Clarence Thomas.
Landau nació en la capital de española Madrid, donde su padre trabajaba como diplomático, y después cumplió misiones en Paraguay, Chile y Venezuela, durante los años 1970 y 1980.