"El principal problema que caracteriza al mundo rural es la brecha que lo separa del mundo urbano, y nosotros estamos convencidos de que las nuevas tecnologías pueden ir cerrando esa distancia", dijo Beduschi.
Beduschi, que trabaja para la oficina latinoamericana de la FAO en Chile, explicó que este fue el quinto foro de esta índole y comentó que el enfoque que decidieron darle a esta versión fue promover la interacción entre los distintos actores.
"Buscamos que trabajen de manera conjunta los gobiernos, las empresas, las organizaciones sociales, los organismos internacionales, los productores y los trabajadores, y que juntos analicen los desafíos y aprendan uno del otro", señaló.
"Este 5G servirá para acortar la brecha urbano-rural en varios sentidos, por ejemplo en el ámbito de la información; hoy un productor del mundo rural no siempre tiene a mano los precios de mercado o de un producto en particular y desaprovecha muchas oportunidades que sí tendría si estuviera mejor conectado", aseguró.
Además, Beduschi mencionó el uso de los drones en el sector rural con los que "se puede monitorear todo un territorio sin moverse de su casa, por ejemplo en Panamá ya se están utilizando en la ruralidad".
"La tecnología viene a abarcar muchas áreas como la automatización, las nuevas fuentes de energía e incluso la biometría, por ejemplo en la ganadería: a una oveja se le puede poner un chip en una oreja y posteriormente el productor monitorea dónde está el animal, cómo se alimenta y cuál es su estado de salud", ejemplificó.
La FAO es la agencia especializada de las Naciones Unidas que otorga apoyo y asesoramiento a los países con el objetivo de mejorar la nutrición y la agricultura de los países.
En Santiago de Chile tiene sede la Oficina Regional para América Latina y el Caribe del organismo.