Agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas de EEUU (ICE) arrestaron a unos 680 inmigrantes en siete plantas procesadoras de alimentos de seis ciudades diferentes en Mississippi, lo que ha sido calificado como la mayor redada contra migrantes de la historia de ese país.
Una de las víctimas de esta brutal agresión contra los indocumentados fue, precisamente, el padre de la pequeña Magdalena quien después de los hechos habló entre lágrimas con la prensa y suplicó la liberación de todos los padres arrestados.
"Gobierno, por favor, muestra algo de corazón, deja que mi padre sea libre con todos los demás, por favor", pidió la niña entre sollozos. "Necesito a mi papá. Mi papá no hizo nada, no es un criminal", decía Magdalena junto a un gimnasio comunitario en Forest, donde fueron trasladados varios niños cuyos padres habían sido detenidos.
Little girl sobs for her father after he was taken during the Mississippi ICE raids. She pleads for him to be let go: "I need my dad." https://t.co/XUQAftIVXF pic.twitter.com/68rru8iVvv
— CBS News (@CBSNews) August 8, 2019
"Estas personas hispanas no están haciendo nada malo. No están robando nada", continuó. "Estoy llorando por mi papá. Muchos niños están llorando y sus esposas… Sus maridos están fuera porque el ICE los agarró. No puedo hacer nada, pero por favor abran las puertas para los padres. Están atrapados en la cárcel", rogó la niña.
Además, Magdalena dijo entre sollozos que su padre le compraba todo para vivir en EEUU, pagaba la renta y ahora ni siquiera sabe dónde va a comer.
Según trascendió, unos 600 agentes del orden participaron en la operación rodeando a las empresas para evitar que los indocumentados se dieran a la fuga. A cada uno les fueron pidiendo sus documentos de identidad y quienes no tenían los papeles en regla fueron trasladados en varios autobuses.
Mike Hurst, fiscal de EEUU para el distrito Sur de Mississippi dijo a la prensa que se trata de hacer cumplir la leyes. "Escuché decir a alguien que un país sin fronteras no era un país, y si bien concuerdo con eso, también diría que sin leyes no hay orden. Hoy a través del trabajo duro de esos agentes de seguridad nos estamos convirtiendo en una nación de la ley y el orden", afirmó.
Hasta el momento, se desconoce la cifra de menores que fueron separados de sus padres, cuando muchos incluso carecían de un tutor legal.