La noche del 15 al 16 de julio comenzaron las huelgas de los trabajadores de Amazon en diferentes ciudades de Alemania. Contaron con la participación de más de 2.000 personas. Además, también hubo protestas en el Reino Unido, España, Polonia y EEUU.
Los trabajadores demandan un salario digno y beneficios, denuncian las condiciones de trabajo físicamente agotadoras y el estrés mental del empleo precario debido a los despidos basados en la productividad. Las quejas son comunes en las instalaciones de Amazon, ya sea en empleados a tiempo parcial o completo.
"Mientras que Amazon ofrece enormes descuentos a sus clientes en el 'Prime Day', los empleados carecen de un salario digno", dijo un representante del sindicato alemán.
Jack Rasmus, profesor de economía en la universidad estadounidense Saint Mary's College of California, explicó a Sputnik qué significan las manifestaciones para el futuro de la empresa.
"Eso es un trabajo de molienda, trabajar en un almacén: agarrar cosas y guardarlas, y apurarse, apurarse, apurarse. Y probablemente saben que el plan de Amazon es automatizar rápidamente esos trabajos", indicó.
Anteriormente se dio a conocer que Amazon había despedido a más de 300 empleados en un almacén de Baltimore (EEUU) entre agosto de 2017 y septiembre de 2018 por no cumplir con las cuotas de productividad. La eficiencia de un trabajador de Amazon es monitoreada por un sistema automatizado que evalúa la productividad, emite advertencias e incluso puede despedir a los empleados sin consultar a un solo humano en el proceso.
"Amazon es un asesino de empleos", dijo el experto.
Según Rasmus, todo este alboroto de los medios de comunicación sobre la creación de puestos de trabajo y otras cosas tiene carácter temporal. Amazon está en un curso intensivo para automatizarlo, opinó.
Amazon está introduciendo nueva maquinaria para reemplazar cientos de miles de trabajos en cada almacén, destacó Rasmus.
De este modo, la jactancia de Amazon de crear miles de puestos de trabajo en nuevas ciudades básicamente viene con un asterisco en términos de mantener ese número, afirmó Rasmus.
En un comunicado de prensa, Amazon se comprometió a invertir más de 700 millones de dólares en programas de capacitación para uno de cada tres de sus empleados en EEUU para el año 2025. Según la empresa, la inversión se basaría en un "salario mínimo de 15 dólares y prestaciones integrales, incluido el seguro médico, un plan de ahorro de 401.000 dólares y una generosa licencia para el cuidado de los hijos".
"Sin embargo, 12.000 dólares por un empleado ni siquiera representa una quinta parte de lo que cuesta un año en una universidad con un título avanzado", dijo Rasmus.
El experto destacó que pocos trabajadores podrán hacer esta transición, "pero es buena publicidad". Agregó, que "los trabajadores no son estúpidos, ellos lo saben".
"Es una gran empresa de tecnología y ahora obtiene la mayor parte de sus ganancias de los contratos gubernamentales del Pentágono. Ahí es donde está ganando dinero", concluyó Rasmus.