"Gracias a la Guardia Nacional y, de forma especial, a las fuerzas armadas hemos cumplido el compromiso de controlar de conformidad con la ley el flujo migratorio sin violar derechos humanos", afirmó el mandatario en conferencia de prensa.
El jefe del Ejecutivo señaló como un buen indicio que las autoridades estadounidenses anunciaran el 11 de julio pasado que disminuyeron en 30% las deportaciones en junio pasado, y descartó que ocurran acciones imprevistas o extraordinarias.
López Obrador dijo que "es algo que pude pasar, pero no está confirmado; y si se diese, tenemos mecanismos de protección a nuestros paisanos y a los migrantes como lo estamos haciendo pero no debemos adelantar vísperas".
Recordó que en septiembre próximo será analizado el cumplimiento del acuerdo migratorio, firmado para que Trump no ejecutara la amenaza de imponer aranceles a las importaciones de productos mexicanos, sin mencionar una evaluación preliminar a los 45 días, que se cumplen el 26 de julio.
"Se decidió evaluar el resultado del acuerdo en tres meses, y no puede haber nada extraordinario, imprevisto como esto de la deportación masiva", puntualizó el presidente.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) anunció que el 14 de julio comenzarían las redadas para deportar hasta un millón de personas que tiene orden de expulsión por parte de la justicia en 10 ciudades de EEUU.
Buena relación y prudencia
El líder mexicano pidió "no adelantar vísperas", pero añadió que "en el caso de que se tomara una decisión así [redadas] nosotros intervendríamos para hacer saber que ese no es el camino".
Insistió en que la relación con el Gobierno de EEUU "es buena" y enfatizó en que existe un compromiso acordado.
López Obrador considera que el peligro que sí existió "fue una amenaza de cobrar aranceles a mercancías mexicanas que se venden en EEUU, eso llevó al acuerdo porque actuamos con prudencia".
Aseguró que la Casa Blanca "entendió" que era mejor el acuerdo migratorio, antes que desatar la guerra de aranceles.
La agencia del Gobierno estadounidense, encargada de movilizar capital privado, anunció el 10 de julio la primera fase de 2.000 millones de dólares.
Aludió también a la iniciativa de Plan de Desarrollo Integral "para que los centroamericanos tengan trabajo y no tengan necesidad de emigrar".
En ese marco, el jefe de Estado confirmó que se reunirá con el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, a finales de julio.
Ese será el siguiente paso para ejecutar la inversión de 100 millones de dólares de parte de su Gobierno, presentada en una reciente visita del presidente de El Salvador, Nayib Bukele.
El secuestro, en primera persona: migrantes cuentan a Sputnik su aterradora experiencia en México https://t.co/yQGg5akB6w
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) June 25, 2019
También descartó un viaje de emergencia del canciller mexicano Marcelo Ebrard a Washington para defender personalmente a los migrantes mexicanos.
"No creo que viaje, tenemos que tener datos fehacientes, solo son declaraciones; hay que esperar y actuar con mucha prudencia, no engancharnos", puntualizó.
Entre diciembre de 2018 y mayo de 2019 las autoridades mexicanas deportaron a más de 80.500 personas, mientras que EEUU detuvo a más de 590.000 migrantes en la frontera suroeste desde octubre a junio pasados.
