"Nuestras inversiones en Rusia ascienden a unos 14.000 millones de euros. Si comparamos nuestras inversiones con otros países, creo que Finlandia es el mayor inversor en la economía rusa per cápita", dijo el embajador.
Precisó que muchas empresas finlandesas tienen en cuenta el régimen de sanciones que afecta las inversiones, pero siempre invierten cuando lo consideran necesario y posible.
"Importamos casi tres veces más de Rusia de lo que exportamos a Rusia; compramos principalmente petróleo, gas, recursos forestales, productos químicos", puntualizó el embajador.
Las relaciones entre Rusia y Occidente empeoraron a raíz de la situación en Ucrania y la reincorporación de Crimea a Rusia tras el referéndum celebrado en marzo de 2014, en el que más del 96% de los votantes avaló esta opción.
Moscú, que respondió a las sanciones con un embargo agroalimentario, considera poco productiva la prórroga de las sanciones económicas contra el país ruso.
Rusia subrayó en reiteradas ocasiones que no es parte del conflicto en Ucrania, y reafirmó que la reintegración de Crimea se llevó a cabo en pleno respeto de la legislación internacional y de la Carta de las Naciones Unidos.
Rusia tiene derecho a intensificar su actividad militar en el Ártico y actúa dentro de su propio territorio, declaró el embajador.
"En cuanto a la actividad militar de Rusia, vemos todo esto, pero Rusia actúa dentro de su propio territorio. Muestro moderación al comentar este tema, pero creo que Rusia tiene el derecho a hacerlo", dijo Hautala.
"Si todo el mundo ve el potencial creciente de esta región, es lógico que Rusia está fortaleciendo su presencia allí. Yo no lo dramatizaría", subrayó el embajador.
A mediados de junio, el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Alexandr Grushkó, declaró que Occidente intenta crear un problema artificial con la "militarización" del Ártico por parte de Rusia con el fin de justificar sus grandes inversiones en la defensa.
A su vez, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó en mayo que Moscú está abierto para organizar "la más amplia cooperación" en el Ártico y que enfoca esta región como "un espacio de paz, estabilidad y cooperación constructiva".