Jesús Santrich, actual legislador de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común —partido político nacido de la exguerrilla FARC—, abandonó el pasado fin de semana a su escolta en una zona rural del municipio de La Paz, cerca de la frontera con Venezuela, en una zona de capacitación y reincorporación para excombatientes.
"Es una situación delicada y que genera malestar. [Santrich] es un hombre mediático, asociado en el último año a un caso de narcotráfico. La noticia genera especulaciones y señalamientos de los críticos del esfuerzo de paz", dijo a En Órbita Luis Celis, sociólogo y asesor en posconflicto de la Fundación Paz y Reconciliación.
Santrich, de 52 años, ha sido acusado por EEUU de conspirar para traficar cocaína y este país ha solicitado su extradición.
El presidente colombiano, Iván Duque, aseguró que el exguerrillero quiere eludir a la Justicia de su país. Por su parte, el partido FARC instó a Santrich a reportar a las autoridades información relacionada con su paradero.
Celis destacó que el exguerrillero no tiene orden de captura, lo que le permite movilizarse libremente por el país.
"No está incumpliendo a ningún llamamiento de la Justicia. Es congresista, pero hoy está en receso. No está incurriendo en ningún delito, pero su ausencia genera incertidumbre. La fecha límite para saber su situación es el próximo 9 de julio, cuando deba presentarse ante la Corte Suprema de Justicia", explicó el entrevistado.
Santrich deberá rendir declaración por supuestos vínculos con el narcotráfico después de la firma de los acuerdos de paz en 2016.
En otro orden, en Costa Rica estudiantes continúan la huelga más allá de la renuncia del ministro de Educación, Edgar Mora, este lunes 1 de julio. Más allá de la dimisión, piden al Gobierno que tome en cuenta un petitorio de 18 puntos para poner fin a sus peticiones.
Los jóvenes están apoyados por los transportistas y por la Asociación Nacional de Empleados Públicos, entre otros sindicatos.
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Entre los aspectos que pretenden negociar está retirar del Congreso el proyecto que pretende que los estudiantes realicen prácticas en empresas privadas a partir del tercer año, es decir, con 15 años de edad.
"Lo que atemoriza es la precarización del estudiantado. Hay normas que legislan a qué edad un estudiante puede trabajar, cuando el joven aún no está capacitado", dijo a En Órbita Marcela Bermúdez, representante del Movimiento Estudiantil de Secundaria Costa Rica, agrupación que no se adhirió a todos los reclamos del colectivo Resistencia Nacional Estudiantil, principal impulsor de las manifestaciones
"Desde la UE hay una exigencia a que los países del Mercosur hagan concesiones. Por su parte, los gobiernos de Argentina y Brasil pusieron por delante una ideología compartida de libre comercio, motivos que llevaron a la firma", dijo a Sputnik el economista Francisco Cantamutto, miembro de la Sociedad de Economía Crítica de Argentina y Uruguay.
"La lógica fue política y geopolítica para que Europa retenga mercados que ha perdido frente a China y EEUU. La UE busca un acceso privilegiado en medio de una guerra por el poder global y además enfrenta una posibilidad de disgregación interna", explicó el entrevistado.
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