"Presentamos el plan parar enfrentar el fenómeno migratorio y evitar una confrontación comercial con EEUU", dijo el mandatario en la conferencia de prensa, junto con el canciller Marcelo Ebrard.
El despliegue total que ya comenzó de la Guardia Nacional, integrada por policías militares, navales y federales "se completará el martes [18 de junio] próximo, con esfuerzos para acelerar el paso", dijo el canciller.
El Instituto Nacional de Migración (INM) encargado de la "regulación" de los indocumentados, contará con casi 17.000 "elementos nuevos, porque no tenían personal suficiente".
Personal encargado de planes de desarrollo apoyará con otros "200 funcionarios de Bienestar Social, que llegan este fin de semana".
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Al mismo tiempo, se crea una Comisión de Ayuda Internacional, con autoridades de los tres países del Triángulo del Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) para impulsar un plan integral de desarrollo" diseñado con la Comisión Económica para América Latina (CEPAL).
El plan "no es de largo plazo, sino que se puede implementar en el corto plazo", subrayó.
Llamado a comunidad internacional
México ha invitado a varias agencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) a participar, entre ellas el Alto Comisionado para Refugiados, el fondo para la infancia (Unicef), y la Organización para las Migración.
Ebrard lamentó que muchos de esos actores internacionales se mantuvieron en silencio durante las tratativas de México con EEUU, la semana pasada.
"Extrañamos muchas voces en los días de negociación, ojalá no están ausentes en la implementación de estas medidas ", expresó el diplomático.
Pidió también a la comunidad internacional que "nos dejen solos, que las agencias internacionales de la ONU se comprometan y participen".
"Es el momento en que se necesita y es prioridad de la organización ¿dónde está la comunidad internacional?", se preguntó.
Ratificó que "EEUU acepta poner recursos en la región, por 5.800 millones de dólares", y que México aportará "4.500 millones de dólares en la zona".
El objetivo central del plan es lograr "certeza y orden para conocer la identidad de quiénes están en territorio nacional, para ofrecerles seguridad, no solo en su integridad física, sino salud y otras prestaciones".
El gobierno mexicano estima en 1,5 millones la cantidad de indocumentados que estarían su territorio.
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Las organizaciones del crimen organizado manejan un mercado negro de hasta 20 millones de dólares diarios, si a cada migrante paga 3.500 a 7.000 dólares, según Ebrard.
Por lo tanto, el negocio del tráfico de personas oscila entre 3.500 y 7.000 millones de dólares, puntualizó.
