El ministerio jordano difundió un comunicado en el que condena "las violaciones más obvias contra al Haram al Sharif [Explanada de las Mezquitas] mediante la infiltración de extremistas protegidos por la policía israelí y los ataques contra fieles [musulmanes] y funcionarios del Awqaf", la institución musulmana que tiene a su cargo el mantenimiento de la Explanada de las Mezquitas.
"Las consecuencias de la peligrosa y repulsiva escalada de Israel y las prácticas provocadoras arrastrarán a la región a una nueva espiral de violencia que amenazará la seguridad del conjunto de la región", se advirtió en el comunicado.
El portavoz de Exteriores jordano Sufian al Qudah dijo que Ammán envió al Gobierno israelí una nota de protesta a través de los canales diplomáticos protestando por "las violaciones de la santidad de los lugares santos", y pidiendo que los ataques se detengan inmediatamente.
La policía israelí permitió la entrada de cientos de judíos a la Explanada coincidiendo con el aniversario de lo que Israel denomina la "liberación y unificación de Jerusalén" en la guerra de 1967 según el calendario religioso judío.
La decisión de permitir el acceso de judíos, muchos de ellos extremistas, a la Explanada de las Mezquitas, la tomaron las autoridades israelíes, aunque con anterioridad evitaban la entrada de judíos en esa zona durante los últimos días del mes de ramadán.
