En una entrevista para Sputnik, Mosayeb Naimi, politólogo iraní especializado en Oriente Medio y director general del periódico estatal persa Al-Vefagh, explica que ni la situación actual ni el propio Estados Unidos ni la tensión militar en la región del golfo Pérsico permitirán a Estados Unidos desatar una guerra.
"Catar ya manifestó a Irán y a los estadounidenses que no puede utilizar su territorio contra Irán. Estas últimas maniobras de EEUU son propaganda estadounidense con el objetivo de enfrentar a Irán con Catar. Y como cualquier país arrastrado a una guerra con Irán sufrirá grandes pérdidas, nadie quiere guerra", explica.
Lo cierto es que, durante el bloqueo económico a Catar, Teherán se puso de parte de Doha. Algo que los cataríes han subrayado. También han recordado que el apoyo de Irán durante ese bloqueo nunca lo van a olvidar, dice Naimi. El politólogo vuelve al tema de las bases cataríes. "Se crearon durante la crisis con Irak" y se ha dicho muchas veces que las bases americanas en Catar no se pueden utilizar contra países vecinos.
"Irán también se esfuerza por calmar la situación. Ha recomendado explícitamente a todos los países de la región que rechacen atender las peticiones de Estados Unidos porque Irán, desde un punto de vista geográfico y estratégico, es la fuerza que más domina en el golfo Pérsico", asegura el experto. Añade que quienes comenzasen una guerra en la región no podrían terminarla porque sus dimensiones aumentarían a medida que entrasen nuevos países en ella.
"Por eso los cataríes nunca pondrán a su país en peligro. Además, con el inicio de una guerra comenzarían los problemas de tránsito de crudo a través del golfo Pérsico, y eso es muy importante para Europa", pronostica.
