El fundador de WikiLeaks escribió desde su celda al periodista independiente, Gordon Dimmack, quien ha decidido divulgar parte del contenido de la carta en su blog y en las redes sociales.
"Siento que he de compartirla para mostrar la mala situación en que se encuentra Assange y recalcar que él sigue peleando", afirma Dimmick en un vídeo colgado en You Tube.
Assange se queja de la falta de acceso a un ordenador, a internet o incluso a la biblioteca del penal de Belmarsh, en el sureste de la capital británica.
"Estoy aislado de todos los accesos para preparar y defender mi caso", lee Dimmack en nombre de su remitente.
De acuerdo con la misiva, Assange puede recibir dos visitas al mes y ha de "competir" con el resto de los reclusos para llamar por teléfono.
"Todas las llamadas, con excepción de las de los abogados, se graban y duran un máximo de diez minutos", señala.
"Estoy indefenso y cuento con vosotros para salvar mi vida", confiesa en las frases leídas por Dimmack.
El ex editor del portal de filtraciones afirma sentirse "roto" y "rodeado, literalmente, de asesinos" en el notorio presidio londinense.
"Los días en que yo podía leer, hablar y organizarme para defenderme y defender mis ideales y a mi gente, han concluido hasta que sea libre", advierte.
Assange no parece dispuesto a abandonar la lucha porque, según escribe desde la cárcel, "la verdad es en definitiva todo lo que tenemos".