"Un documento obtenido por el Ministerio Público, producido por la propia Vale, estima que, si permanece en la actual velocidad de aceleración el movimiento del talud norte de la mina de Gongo Soco, su ruptura podría producirse entre el 19 y el 25 de mayo", informó este organismo en una nota oficial.
Por ello, la Fiscalía recomendó a Vale que adopte "inmediatamente" medidas para dejar claro a la población local del riesgo al que está sujeta, divulgando esa informaciones claras y verídicas en periódicos y radios locales, entre otros canales.
Esta nueva situación de emergencia se produce después de que el 25 de enero se rompiera la represa de la mina Corrego do Feijao, en Brumadinho, a poco más de 100 kilómetros de distancia y también propiedad de la empresa Vale.
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La rotura de ese dique provocó un alud de barro que dejó 236 muertos y un grave desastre medioambiental, mientras que 34 personas permanecen desaparecidas.
