El encuentro del sumo pontífice con los artesanos de las tijeras incluyó una conversación sobre San Martín de Porres, el primer santo afrodescendiente de América. Nacido en Lima en 1579, se desempeñó entre otras cosas como barbero, de ahí que haya sido nombrado patrono de los estilistas.
"La figura humilde y grande de San Martín de Porres, que el papa San Pablo VI, en 1966, proclamó patrono de su categoría, los ayuda a testimoniar constantemente los valores cristianos", dijo el eclesiástico en su encuentro.
"Los estimula, sobre todo, a ejercer su profesión con estilo cristiano, tratando a los clientes con gentileza y cortesía, y ofreciéndoles siempre un buen consejo y un estímulo, evitando ceder ante la tentación del chusmerío que se insinúa en su contexto laboral, lo sabemos todos", aseguró el papa argentino.
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Francisco abundó sobre la "rectitud" necesaria en el trabajo del salón, para "una contribución positiva al bien común de la sociedad". Los peluqueros llegaron en peregrinaje a la tumba de los apóstoles con motivo de su habitual día de descanso, según detalla el periódico oficial de la Santa Sede, Vatican News.
No es la primera vez que el pontífice lanza una cruzada contra el chisme. En enero de 2018, el titular de la Cátedra de San Pedro había asegurado en una visita pastoral Perú que las monjas chismosas eran "peores" que los responsables de los atentados terroristas del grupo 'Sendero Luminoso'.
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