"Jesús Gerardo Gutiérrez Rojas, de 37 años, María de Guadalupe Alexandra Podestá Bengoa, de 38, Virgilio Ignacio Polo Dávila, de 43, y Omar Alfredo Portocarrero Cáceres, de 39, enfrentan cargos federales en (la ciudad de) Miami (sudeste de EEUU)", dice el comunicado.
Las autoridades peruanas arrestaron a los cuatro sospechosos a fines de 2017, ante la solicitud de extradición de EEUU por los delitos de "conspiración para cometer fraude electrónico, fraude de correo o colaboración e instigación a este delito", según el diario oficial El Peruano.
"Los acusados supuestamente administraban y operaban centros de llamadas en Perú (desde donde) amenazaban a las víctimas, personas hispanohablantes residentes en EEUU, para que pagaran acuerdos fraudulentos por deudas inexistentes. Muchas de las víctimas consumidoras eran ancianos", dice el comunicado del Departamento de Justicia de EEUU.
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La acusación estadounidense asegura que los cuatro peruanos fingían ser abogados y representantes del Gobierno para amenazar a las víctimas, a quienes les decían que serían demandadas por compañías que obtendrían grandes sumas monetarias a partir de litigios en su contra.