"Comenzamos a confiar en Rusia y Siria: la segunda reunión de coordinación lo demostró en su totalidad y nos esforzaremos al máximo para que la gente pueda salir. Vemos que ustedes realmente desean ayudarnos", dijo el anciano Muziad Abeid, de la provincia de Homs.
Asimismo denunciaron la falta de trabajo por parte de la ONU.
"El trabajo de la ONU tampoco lo vemos; ahora están con nosotros, luego con los estadounidenses, la política de doble rasero", dijo el anciano Mohamad Khalid de Palmira, respondiendo a la pregunta sobre las acciones de la ONU para ayudar a las personas que desean regresar a sus hogares.
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Los ancianos también expresaron su agradecimiento al Gobierno de Siria por haber facilitado al máximo el procedimiento para acogida de refugiados de Rukban.
"Se ha creado una comisión especial; el Gobierno sirio en cooperación con Rusia facilita al máximo y participa en la pronta resolución del problema del campamento de refugiados de Rukban, y también realiza estas actividades en cooperación con la Media Luna Roja Árabe Siria", dijo el representante de la Oficina de Seguridad Nacional, brigadier general, Eyad Mando.
Antes del cierre de las negociaciones, uno de los ancianos, frente a los periodistas le entregó al representante de la Oficina de Seguridad Nacional una impresionante pila de papeles, en la que figuraban los nombres de los habitantes de Rukban que deseaban salir y regularizar su situación.
El campamento, que alberga a decenas de miles de personas que viven en pésimas condiciones, fue creado en la frontera sirio-jordana en 2014, después de que Amán cerrara la frontera para los refugiados sirios, alegando razones de seguridad y económicas.
Según la asesora de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, Rana Zaqout, la situación en Rukban es crítica y los refugiados están tratando de huir debido a la falta de servicios básicos y los riesgos para su seguridad.