En los dos primeros meses del año, el déficit comercial también se redujo a 112,8 millones de dólares, desde los 118,1 millones del mismo período del año anterior, mientras que en el año móvil a febrero la balanza acumuló un resultado negativo de 804,6 millones de dólares, desde los 63,64 millones en los 12 meses a febrero de 2018.
El resultado de febrero se debió a una caída de 10,3% en las importaciones, que equivalieron a 560,5 millones de dólares, frente a 624,8 millones de febrero del año pasado.
Las exportaciones de la industria manufacturera cayeron un 10,2%, en particular relacionadas con la producción del sector cárnico, uno de los principales productos uruguayos de venta al exterior.
En las importaciones influyó una caída de la compra de petróleo y destilados de un 32,4% y una disminución del 19,4% en el sector de automotores y transporte.
En febrero, Brasil y China fueron los principales destinos de los productos uruguayos, con compras por 89,2 millones de dólares y 98,8 millones, respectivamente.
Esos dos países fueron también los principales orígenes de las importaciones uruguayas; Brasil le vendió a Uruguay mercaderías por 116,6 millones de dólares y China 126,4 millones de dólares.
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La economía uruguaya podría sufrir una desaceleración del crecimiento en 2019, tras 16 años de expansión consecutivos.
En 2018, el Producto Interno Bruto (PIB) se expandió un 1,6% frente al año previo, cuando la economía creció un 2,5%; el Gobierno proyectaba un aumento de entre 2,5% y 3%.
