"Un presidente del Consejo Ejecutivo de una organización internacional con tanta autoridad debe cumplir sus funciones conforme al mandato y las reglas de la OPAQ, trabajar de manera responsable y transparente, pero muy lamentablemente esto justamente no ocurre", reza el texto.
El 26 de marzo, la Cancillería rusa afirmó que Reinisova no tenía derecho a visitar instalaciones químicas estadounidenses en Colorado en nombre de todos los países de Europa del Este.
Este 29 de marzo, la Cancillería rusa cuestionó las declaraciones de que las acciones de Reinisova se basaron en las instrucciones del Ministerio de Exteriores checo.
"Es una confirmación directa de que las acciones de Reinisova, con todo su deseo personal, no pudieron ser totalmente imparciales, todo eso es preocupante", indica el comunicado.
Al recordar que la República Checa integra tanto la OTAN como la Unión Europea, el Ministerio de Exteriores ruso atribuyó la actual "politización extrema" del trabajo de la Secretaría Técnica de la OPAQ a la "llamada solidaridad euroatlántica bajo el estricto control de Washington".