"Queremos que Prosur sea un foro sin ideologías, sin burocracia, con un dialogo franco y directo, que tenga un compromiso fuerte y claro con los principios de los derechos humanos", afirmó Piñera al recibir a los mandatarios del grupo, al que no fue invitado Venezuela y del que Bolivia y Uruguay participan solo como observadores.
Durante la mañana, Piñera recibió a seis mandatarios, dos vicecancilleres y dos representantes diplomáticos de la región en la sede de Gobierno, el Palacio de La Moneda (sede del Gobierno) para iniciar la primera cumbre de Prosur.
En su discurso inaugural, Piñera agradeció en particular a los seis mandatarios presentes: Mario Abdo de Paraguay, Iván Duque de Colombia, Jair Bolsonaro de Brasil, Lenín Moreno de Ecuador, Martín Vizcarra de Perú y Mauricio Macri de Argentina.
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Piñera valoró que los mandatarios "hayan hecho un espacio en sus exigentes agendas para esta ocasión", señalando que hacía más de cinco años que no se producía un encuentro de tan alto nivel en América del Sur.
El presidente chileno explicó que en esta segunda instancia se verán los temas específicos que preocupan a cada país, temas que han sido planteados por los mismos representantes del bloque.
"Prosur será un marco para que se formen grupos de trabajo, para que se acuerden los presupuestos, y se aborden temas importantes como infraestructura, salud, energía, defensa, medioambiente y cambio climático", cerró.
Prosur es una instancia regional nueva impulsada por los presidentes Piñera y Duque con el objetivo principal de reemplazar a la actual Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), con el argumento de que esa instancia dejó de ser efectiva por su supuesta "ideologización".