"El acceso a la averiguación previa sobre el homicidio de Luis Donaldo Colosio nos brindará información de interés general, pero favorece el escrutinio del actuar de nuestras autoridades", dijo Sánchez Ley, autora de un libro sobre el magnicidio y periodista de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
El comisionado del INAI, Oscar Guerra Ford, argumentó que, "en la lógica de la transparencia y la apertura de la información pública y la rendición de cuentas, sigue vivo el interés de la sociedad mexicana por conocer el detalle de los elementos del Ministerio Público federal" durante la investigación.
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La Fiscalía había reservado la información por un periodo de cinco años, o hasta que se extinguieran las causas que dieron origen a la clasificación, pero un nuevo recurso de revisión fue interpuesto ante el INAI, con el argumento de que en el año 2000 un subprocurador especial señaló que "las líneas de investigación estaban prácticamente agotadas".
Sánchez Ley, autora del libro publicado en 2017, "El infierno de hielo — Testimonios desde Almoloya", nombre de la cárcel de alta seguridad donde está recluido el asesino confeso, logró que la justicia le permitiera acceso a los primeros folios que fueron desclasificados por el Poder Judicial.
"El principal logro es haber obtenido los 9.000 folios de documentos que en el año 2000 fueron clasificados por 35 años por autoridades judiciales, esgrimiendo que aún podría completarse la investigación para resolver las pistas inconclusas y (la aparición de) más culpables del magnicidio", dijo en aquella ocasión a esta agencia.
Los nuevos 68.000 folios están bajo resguardo de la Fiscalía, y con el dictamen del INAI "quedará abierta toda la documentación pública del caso", dijo Sánchez Ley.
Larga investigación independiente
Con los primeros documentos obtenidos por MCCI surgieron nuevas interrogantes y contradicciones de la investigación del magnicidio de Colosio (1950-1994).
Esas contradicciones del juicio fueron ignoradas por el juez.
Tras escribir el perfil biográfico de Mario Aburto, sentenciado a los 23 años como único culpable a 42 años de cárcel, apenas seis meses después del crimen perpetrado en la localidad Lomas Taurinas en la norteña ciudad de Tijuana, la investigadora logró que un juez desclasificara la primera parte del expediente por una gestión de MCCI, que ahora consuma su exigencia.
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Aburto comenzó confesando que ideó un plan para asesinar a Colosio y que actuó en solitario, pero en una segunda confesión denunció maltratos, abusos físicos y amenazas de los interrogadores.
El expediente sobre el asesinato perpetrado cuando Colosio caminaba apretujado entre una multitud fue finalmente entregado a la autora por un juez que llevó todo el proceso penal contra Aburto.
"No intentamos desacreditar la investigación ni exculpar al asesino condenado", aclaró la investigadora, que descubrió que cuatro implicados más, que rodeaban al candidato en el momento que recibió un primer disparo en la cabeza y otro en el abdomen, fueron exonerados.
