Miembros de su Gabinete se alinearán así en bandas opuestas del Parlamento de Westminster al día siguiente de la segunda descomunal derrota del Acuerdo de Retirada de la Unión Europea, que se había reforzado con garantías legales por parte la UE.
"Puede que haya perdido mi voz, pero entiendo la voz de mi país", dijo en tono hondamente ronco.
La primera ministra resistió con marcado genio los envites del líder de la oposición, Jeremy Corbyn, que le conminó a admitir el fracaso definitivo de su estrategia de salida y futura relación con la UE.
"El acuerdo ha sido rechazado dos veces por una mayoría sin precedentes… el voto de anoche acabó con su acuerdo… ya es hora de que deje sus líneas rojas y afronte la realidad", desafió el dirigente laborista.
"Esta Cámara necesitará determinar cuál es su posición, pero el Gobierno continuará trabajando para marchar de la UE con un buen acuerdo", respondió desafiante.
La moción de May incluye una coletilla que deja constancia de que la "salida sin acuerdo" es el procedimiento legal vigente en el canon británico y comunitario "salvo que la Cámara y la UE ratifiquen un acuerdo".
Además: Oficina de May: las consultas con la UE sobre el Brexit están estancadas
El presidente de la Cámara ha admitido a votación una enmienda que descarta el Brexit duro con mayor claridad y sin límites temporales.
El 14 de marzo, el Gobierno presentará otra moción sobre la solicitud de una prórroga en el plazo de dos años establecido en el Tratado de la UE, que legalmente expira el 29 de marzo.