"El peso cerró la sesión con una depreciación de 1,18% o 22,8 centavos, cotizando alrededor de 19,59 pesos por dólar y tocando un máximo de 19,62 pesos, ante un claro deterioro del panorama para el crecimiento económico global, lo cual genera aversión al riesgo y pérdidas para la mayoría de las divisas, en particular las de economías emergentes", dijo la institución financiera en informe a sus clientes al cual tuvo acceso Sputnik.
Ese mismo día, la organización de las mayores economías recortó 0,5% la expectativa para la economía mexicana a 2 y 2,3%, en 2019 y 2020.
El Banco Central Europeo (BCE) también decidió ajustar a la baja su previsión de crecimiento para la Eurozona, de 1,7 a 1,1%.
El recorte a las expectativas de crecimiento estuvo acompañado de un "comunicado acomodaticio" de BCE, indicando que no subirán las tasas de interés en el año y reintrodujeron un programa de operaciones de refinanciamiento a largo plazo que consiste en inyecciones de liquidez al sistema financiero por medio de préstamos.
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La depreciación del peso se debió a ese contexto internacional complicado para el crecimiento económico y un incremento de la aversión al riesgo; pero también a cuatro "factores de riesgo internos" que elevan la vulnerabilidad del peso, ante episodios de volatilidad en el mercado cambiario.
El primer riesgo obedece a las "menores expectativas de crecimiento económico para México"; y el segundo, a los "ajustes de estable a negativa" en la perspectiva para la calificación de la deuda por parte de tres principales calificadoras de riesgo en los últimos seis meses, Standard & Poor's, Fitch Rating y Moody's.
El tercer factor de riesgo es la posible aprobación en marzo de "una reforma laboral y de una nueva regulación para las comisiones bancarias" por el Congreso, y el cuarto es el reto que enfrenta el Gobierno del presidente André Manuel López Obrador para "procurar finanzas públicas sanas en un contexto económico de menor crecimiento".
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Por lo anterior, Banco Base considera que es "probable que el tipo de cambio siga enfrentando presiones al alza", con la posibilidad de que alcance un nivel cercano a 19,65 pesos por dólar.
No se descarta que la confirmación de una desaceleración económica global con la publicación de indicadores de crecimiento en abril, pueda generar nuevos episodios de aversión al riesgo que muevan al tipo de cambio hacia un nivel de 20 pesos por dólar, que es promedio estimado por el Gobierno mexicano.
