Para el diplomático ruso, "los llamados más enérgicos a la reconciliación en Venezuela llegan hoy desde el Vaticano, aunque rehúye la mediación oficial".
"Hay un margen muy escaso para interponer los buenos oficios, de modo que el Vaticano prefiere alentar a los dos bandos al diálogo constructivo, sin implicarse en el proceso de conversaciones", dijo el embajador.
Avdéev señaló que "la enorme presión externa sobre Venezuela y sobre los mediadores capaces de contribuir a la reconciliación, la amenaza de intervención militar y el abierto cabildeo por la oposición no dejan plataforma para una mediación imparcial y efectiva".
Venezuela atraviesa una crisis económica y política que se agravó el 23 de enero, después de que el jefe de la opositora Asamblea Nacional (parlamento unicameral), Juan Guaidó, se autoproclamara "presidente encargado" del país.
El jefe del Estado venezolano, Nicolás Maduro, quien asumió el segundo mandato el 10 de enero, calificó la declaración de Guaidó como un intento de golpe de Estado y responsabilizó a EEUU de haberlo orquestado.
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Guaidó fue reconocido por EEUU, la mayoría de los países integrantes del Grupo de Lima y varias naciones más del continente americano, así como por buena parte de los Estados miembros de la Unión Europea.
Rusia, así como Bolivia, China, Cuba, Irán, Turquía y otros países, reafirmaron su respaldo al actual Gobierno venezolano.
