"La familia (Pizano Ponce de León) conoce la decisión que se ha adoptado, igualmente conoce el informe de necropsia clínica (…) y me ha autorizado para manifestar públicamente que confían plenamente en la Fiscalía General y en los resultados que hemos dado a conocer", dijo el fiscal General de Colombia, Néstor Humberto Martínez, en rueda de prensa.
Alejandro Pizano murió el pasado 11 de noviembre tras ingerir por accidente el contenido de una botella de agua saborizada que tenía cianuro y que se encontraba en el escritorio de su padre, quien había muerto tres días antes, el 8 de noviembre, a causa de un infarto.
Ambos hechos se produjeron en la casa de descanso de la familia Pizano en el municipio de Subachoque (centro), cercano a Bogotá.
El fiscal relató que Alejandro Pizano se sintió mal inmediatamente de probar el contenido de la botella y fue llevado a un centro médico donde murió.
Asimismo, indicó que la Fiscalía "obtuvo diferentes testimonios de terceros y de su propia siquiatra que dan cuenta de que en varias oportunidades el doctor Jorge Enrique Pizano manifestó, en distintos momentos y lugares, que una opción en su periplo vital era el consumo de un tóxico".
El funcionario agregó que según testimonios de una empleada doméstica de Pizano, un día antes de su muerte el exauditor se encerró en el baño de su casa de descanso con una de las botellas de agua saborizada, la cual contaminó en ese momento con cianuro que él mismo también compró y que fue hallado por la Fiscalía días después.
Martínez también relató que esa empleada encontró una carta escrita por Jorge Enrique Pizano bajo el título de 'Tareas por hacer', en la que se describían once puntos con asuntos pendientes para su familia, que incluían temas bancarios y de pensión, y agregó que según el testimonio de la mujer, ella vio la botella de agua saborizada sobre el escritorio de Pizano.
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Según el fiscal general, debido a que la investigación permitió concluir que la muerte de Alejandro Pizano se trató de un accidente, al beber por error el agua contaminada con cianuro del escritorio de su padre, se determinó archivar el caso.
Respecto de Jorge Enrique Pizano, Martínez señaló que pese a que tuvo la intención de suicidarse, falleció el 8 de noviembre por causa de un infarto provocado por la situación de estrés sicológico en la que se encontraba.
Pizano pensaba que Martínez tampoco tomó las medidas respectivas cuando asumió como fiscal general, en agosto de 2016, y sólo actuó después de que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) reveló en diciembre de ese año la trama de corrupción de Odebrecht en 12 países.
En 2018, Pizano dijo a periodistas que temía por su vida, que pensaba que era víctima de una argucia por parte de la Fiscalía y que por ello buscaba contactar con el FBI para concretar un acuerdo como testigo protegido en el caso Odebrecht.
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