"Hay más de 20.000 represas en Brasil. De estas, 3.386 están clasificadas como con un alto potencial de daño o con alto riesgo. Han sido designadas como una prioridad", dijo el ministro, según sitio web G1.
A pesar de que el jerarca sostuvo que el Gobierno intentará supervisar las represas lo más rápido posible, no estableció un plazo.
Canuto hizo estas afirmaciones luego de asistir a una reunión ministerial en el Palacio presidencial, donde se analizó la rotura de la represa de la minera Vale el 25 de enero, cerca de la ciudad de Brumadinho, ubicada en el sureste de Brasil.
El torrente de lodo dejó al menos 65 muertos confirmados y 288 desaparecidos.
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Se espera que la operación de búsqueda y rescate continúe.
