"El terrorista italiano Cesare Battisti fue arrestado en Bolivia esta noche y pronto será traído a Brasil, de donde probablemente será llevado hasta Italia para que pueda cumplir la pena perpetua, de acuerdo con la decisión de la justicia italiana", publicó en su cuenta de Twitter Filipe Martins, consejero especial de la Presidencia para Asuntos internacionales.
O terrorista italiano Cesare Battisti foi preso na Bolívia esta noite e em breve será trazido para o Brasil, de onde provavelmente será levado até a Itália para que ele possa cumprir pena perpétua, de acordo com a decisão da justiça italiana.
— Filipe G. Martins (@filgmartin) 13 de enero de 2019
El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, agradeció a los gobiernos de Brasil y Bolivia por haber hecho posible el arresto de Battisti.
"Mi más sincero agradecimiento al presidente Jair Messias Bolsonaro y al nuevo gobierno brasileño por el cambio del clima político que, junto con un escenario internacional positivo en el que Italia se ha convertido en protagonista, ha permitido este éxito esperado durante años, gracias a las autoridades bolivianas y la colaboración de otros países amigos", apuntó Salvini en su página de Facebook.
Para el ministro, Battisti es "un criminal que no merece una vida cómoda en la playa, sino terminar sus días en prisión".
Nacido en 1954, Cesare Battisti militó en un grupo de extrema izquierda Proletarios Armados por el Comunismo (PAC) y fue condenado a cadena perpetua por su implicación en cuatro homicidios y otros delitos terroristas cometidos en 1960-1980, un período de militancia armada y violencia callejera conocido como Años de plomos, por el título de una película dirigida por Margarethe von Trotta.
En 2010, el entonces presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se negó a autorizar su extradición a Italia y le concedió el derecho de asilo y el visado permanente. La sucesora de Lula, Dilma Rousseff, confirmó el rechazo al año siguiente alegando que podría sufrir persecución por motivos ideológicos en Italia.
Después de la excarcelación, Battisti permaneció en libertad hasta mediados de marzo de 2015, cuando fue nuevamente arrestado pero quedó liberado pocos días después. En octubre de 2017 fue detenido otra vez en la frontera con Bolivia y liberado de nuevo. Según las leyes vigentes en Brasil, los delitos cometidos por Battisti prescribieron en 2013.