"No podemos permitirnos que un posible ataque a las estructuras de información u otros sistemas informáticos importantes afecte la seguridad y la actividad de la República Checa como Estado soberano", explicó Petricek.
Sin embargo, añadió que el compromiso del Estado de proteger a sus ciudadanos no va en contra de su interés por desarrollar las relaciones económicas y el comercio con China.
El primer ministro checo, Andrej Babis, y el embajador chino, sostuvieron una reunión sobre el tema y la interpretación de este encuentro fue publicada en la página de la misión diplomática de China.
Babis expresó su protesta respecto a la publicación, acusando al embajador chino de mentir.
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"Llegamos a la conclusión de que es necesario centrarse en la colaboración positiva, así que doy por cerrado el asunto", dijo Petricek.
El lunes el Gobierno checo ordenó evaluar los riesgos de uso de software de Huawei y ZTE en unos 160 organismos y empresas más importantes del país.
