Una de ellas son los disparos con cañones en la fortaleza de San Pedro y San Pablo. En las imágenes se oye como uno de los presentes felicita al presidente por el exitoso disparo, mientras que otra persona bromea diciendo que 'dio en el blanco'.
"¡Claro! ¡Aquí es difícil fallar!", respondió bromeando el mandatario ruso.
A los mandos del segundo cañón estaba un destacado constructor de Rusia que este mismo día cumplía 85 años. Vladímir Putin lo felicitó y le regaló una pluma conmemorativa.