"Los grupos de trabajo estadounidense y chino celebrarán negociaciones constructivas para implementar los acuerdos importantes logrados por los líderes de los dos países durante su reunión en Argentina", señala el texto.
Pekín y Washington libran una guerra comercial desde que el presidente de EEUU, Donald Trump, anunció en junio que importaciones chinas por un total de 50.000 millones de dólares serían sometidas a impuestos de hasta 25 por ciento, como forma de afrontar el déficit desfavorable a EEUU en el intercambio bilateral.
A principios de diciembre, al margen de la cumbre del G20 en Argentina, los líderes de las dos mayores economías del mundo acordaron una tregua en la guerra comercial.
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El presidente chino, Xi Jinping, prometió corregir el desequilibrio en la balanza comercial con Estados Unidos importando más productos agrícolas, energéticos e industriales.
Trump, por su parte, acordó suspender los planes para aumentar los aranceles a productos chinos por un valor de 200.000 millones de dólares del 10 al 25 por ciento para allanar el camino para las negociaciones con Pekín, pero advirtió que si las tratativas no tienen éxito dentro de tres meses las tarifas serán establecidas según lo planeado.