El procesamiento de la nieve está a cargo de la compañía Mosvodokanal. Después de Nueva York y de Ciudad de México, Moscú posee las mayores plantas de tratamiento de aguas residuales en términos de productividad.
Antes, la nieve recogida en las calles capitalinas simplemente se vertía sobre el río Moscova. Era una solución sencilla y práctica. El único problema es que así toda la suciedad, las impurezas y los residuos caían junto con la nieve en el río que fluye a través de Moscú.
Después de que la nieve acumulada en ellos se derrita y se convierta en agua, se mezcla con aguas residuales y se inicia su tratamiento biológico en los llamados 'aerotanques', compartió con Sputnik Italia uno de los ingenieros Gueorgui Jamidov.
En los aerotanques se utilizan bacterias especiales que se alimentan no solo de materia orgánica, sino también de nitrógeno y fósforo, cuya presencia causa la contaminación del río. Hay diversas plantas de tratamiento de agua en el mundo capaces de purificar el agua de nitrógeno y de fósforo, pero lo hacen químicamente, con la adición de reactivos. Las centrales de Mosvodokanal lo hacen "sin química".
La longitud de las instalaciones de tratamiento alcanza los 320 metros y es la mayor de Europa. Su capacidad es de 500.000 metros cúbicos por día.
La planta cuenta con un sistema especial de control de calidad de la purificación. Al final del proceso, parte del agua es enviada a un acuario donde viven esturiones, especialmente sensibles a la calidad de la misma. Hasta el día de hoy, nunca han presentado problemas de salud.