"En el último informe emitido por el Senamhi se indica que la probabilidad de ocurrencia del evento El Niño se ha mantenido similar al mes anterior [noviembre], y está en 60% para el Pacífico oriental, donde está ubicada la costa norte de Perú, lo que significa un Niño entre débil a moderado", explicó la meteoróloga.
El FEN es un evento climático en el que las corrientes comúnmente frías de la costa norte de Perú y sur de Ecuador experimentan alza en sus temperaturas, lo que genera un exceso de humedad en el ambiente.
En 2017, Perú sufrió un FEN de alta intensidad y consecuencias graves.
Los departamentos costeros del norte (Tumbes, Piura, Lambayeque y La Libertad) experimentaron pérdidas humanas y materiales numerosas, con ciudades enteras devastadas por las inclemencias naturales.
El Gobierno peruano estima que las pérdidas materiales por el desastre superaron los 3.000 millones de dólares.
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Ávalos, sin embargo, indica que "si el mar se calienta un poco más frente a la costa podríamos tener unos meses con un rango de lluvias normal a superior, pero nada comparado a lo que ocurrió en El Niño de 2017".
A pesar de descartar un FEN considerable, las zonas pobladas cercanas a los ríos y en las áreas periféricas de las ciudades podrían verse "algo afectadas" por desbordes, pero en modo alguno de manera grave.
El FEN es cíclico, pero aún no ha sido posible determinar con mucha anticipación y exactitud cada cuánto tiempo se presentará uno y qué tan grave será.
