Turquía había solicitado permiso para la compra de cuatro complejos con 20 lanzadoras y 80 misiles interceptores.
"Turquía utilizará el Patriot para reforzar sus capacidades de defensa antimisiles, proteger su integridad territorial y disuadir las amenazas regionales", dice la nota.
Además, añade, estos sistemas "aumentarán las capacidades defensivas de los militares turcos para defenderse de una agresión hostil, así como para proteger a los aliados de la OTAN que pueden instruir y actuar en el territorio de Turquía".
La medida se aprueba en medio de las tensiones entre Estados Unidos y Turquía sobre varios asuntos, entre ellos los planes de Ankara de comprar sistemas de misiles antiaéreos S-400 a Rusia.
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