"La declaración categórica de EEUU sobre el Nord Stream 2 en la que insta a Alemania que lo abandone, y a la Unión Europea que fortalezca las filas 'contra la agresión rusa' es una burda injerencia en los asuntos de sus socios soberanos", dijo.
El senador señaló que Rusia no interviene, por ejemplo, en las disputas comerciales entre Washington y Pekín o en la crisis en torno al Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
"No lo hacemos, primero, porque Rusia respeta la soberanía de sus socios y nunca interfiere en los asuntos de otros… Y con esta actitud nos correspondemos con el estatus de una potencia mundial, y con esto, por supuesto, nos diferenciamos de los estadounidenses impertinentes, creídos de su exclusividad y la permisividad que acarrea", aseveró.
El proyecto prevé el tendido de dos tuberías de gas con una capacidad total de 55.000 millones de metros cúbicos anuales desde la costa rusa hasta Alemania por el fondo del mar Báltico.
Países como EEUU, Ucrania, Letonia, Lituania y Polonia expresan su rechazo a la construcción del gasoducto, advirtiendo que haría aumentar la dependencia del gas ruso.
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Rusia insiste en que el proyecto Nord Stream 2 es puramente comercial y competitivo y no implica el fin del tránsito del gas ruso a la Unión Europea (UE) a través de Ucrania.