"Desde el inicio del movimiento [de los chalecos amarillos], cuatro de nuestros compatriotas han muerto, muchos centenares de ciudadanos, en particular, miembros de nuestras fuerzas de seguridad, han resultado heridos, a menudo de gravedad", afirmó el jefe de Gobierno en un mensaje televisado a la nación.
En las protestas del 24 de noviembre participaron más de 100.000 personas, según las cifras oficiales. La policía arrestó a más de un centenar de manifestantes.
El 1 de diciembre el Gobierno francés sacó a 65.000 agentes para controlar las protestas que se saldaron con más de 400 detenidos y 133 heridos.
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En lo que va de año, según la emisora Europe1, el precio del gasóleo se incrementó un 23% y el de la gasolina, un 15%.
Como resultado de las protestas, el primer ministro galo anunció este 4 de diciembre que suspende durante seis meses el impuesto sobre los carburantes, en un intento de resolver la crisis de los chalecos amarillos.
