El también presentador de televisión se acogió a su derecho a no declarar y explicó su decisión a la salida del juzgado de instrucción de Madrid, donde le increparon un grupo de personas de ultraderecha al grito de "malnacido"
"Como veis, no es momento de hablar. Es momento de callar y escuchar lo que diga la justicia", aseguró el cómico.
Mateo clasificó como "muy serio" todo lo que esta sucediendo.
Además afirmó estar "preocupado" porque "estamos llevando a un payaso ante la justicia por hacer su trabajo; y esto me preocupa por la imagen de mi país y mi bandera".
La denuncia fue interpuesta por la organización Alternativa Sindical de Policía.
El sketch fue emitido el pasado 31 de octubre en el programa El Intermedio de la cadena de televisión La Sexta.
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Dani Mateo se sonaba la nariz por error con la bandera de España mientras hablaba de un medicamento para el resfriado.
La cadena pidió disculpas y afirmó que "no hubo intencionalidad política ni ningún posicionamiento editorial detrás, era simplemente humor".
No es la primera vez que un chiste de Dani Mateo acaba en los juzgados, ya que 2017 fue denunciado por una asociación franquista tras realizar un chascarrillo relacionado con el Valle de los Caídos, el mausoleo en el que está enterrado el dictador.
La querella fue admitida a trámite y el humorista tuvo que acudir a un juzgado a prestar declaración, aunque finalmente la causa fue archivada.
