Los inmigrantes "ingresaron armas y drogas, incumpliendo claramente las normas del manual de convivencia firmado por ellos mismos a su ingreso al campamento humanitario de paso y afectando a la población que se encontraba en el campamento, como mujeres embarazadas y niños", dice un despacho de la página web del telenoticiero Noticias Caracol, citando a la Secretaría de Integración Social.
El pasado 13 de noviembre alrededor de 300 inmigrantes fueron trasladados de la calle a un albergue en la localidad de Engativá, Bogotá, donde fueron recibidos con expresiones de rechazo, carteles y cierre de pasos para los vehículos que los transportaban, lo que también generó algunos enfrentamientos con la policía.
El albergue está compuesto por 60 tiendas, de las cuales 56 son pequeñas y sirven para ubicar entre cuatro y ocho personas, mientras que las restantes son familiares y alojan hasta 50 personas.
Este grupo de inmigrantes permanecerán allí hasta enero próximo, según las autoridades.