"Se constata un movimiento activo de los sirios desde Jordania, en una jornada grupos de más de mil personas pasan a través del paso fronterizo Nasib", dijo el general.
Precisó que "la semana pasada, a los lugares donde habían vivido antes de la guerra, regresaron 7.620 civiles sirios, entre ellos 5.979, de los territorios de otros países, y 1.641 personas, de otras regiones de su país".
El mismo día 28 refugiados regresaron al arrabal damasceno de Guta Oriental y 256, a las gobernaciones de Deir Ezzor y Damasco, agregó.
En total, según Mizíntsev, hasta la fecha más de 1.518.000 sirios regresaron a sus hogares, incluyendo más de 1.249.000 desplazados internos y más de 268.000 llegados desde el extranjero.
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Además, se observa una tendencia positiva en la reconstrucción de las infraestructuras en Siria y cada vez más países se ofrecen para ayudar al país árabe, constató el militar.
Noruega confirmó su disposición a participar en la reconstrucción de los centros educativos, hospitales e infraestructuras de abastecimiento del agua y Rusia, a su vez, espera que "otros países europeos se solidaricen con el gesto de buena voluntad de los noruegos".
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Las organizaciones humanitarias internacionales también ayudan activamente, destacó Mizíntsev, en particular, a principios de noviembre se logró suministrar ayuda humanitaria al campamento de refugiados Rukban, situado en la zona controlada por los estadounidenses.
"Gracias a los esfuerzos del Centro ruso para la Reconciliación y el centro interdepartamental de coordinación de Siria, así como la participación y la coordinación directa por parte de los organismos de las Naciones Unidas, se logró llegar a un acuerdo con EEUU y satisfacer, al menos parcialmente, las necesidades de los residentes del campamento en alimentos, artículos básicos y medicamentos", comunicó.